Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles se presenta como el gran regreso del universo táctico por excelencia de Square Enix, uniendo nuevas generaciones y veteranos con la promesa de expandir y modernizar la visión estratégica ya legendaria de la saga. Los desarrolladores han apostado por un guion que, como en la obra original, recurre al drama geopolítico, las traiciones y la moralidad gris que definen a Ivalice. En esta entrega, la historia nos sitúa tras la guerra de los Leones y antes del imperio de Rozarria, explorando las consecuencias del ciclo histórico y las luchas seculares entre dinastías y facciones religiosas.
Se han incorporado nuevos personajes, entre ellos Caelis (el protagonista principal, un estratega marcado por un linaje maldito) y Marcellia (la nueva matriarca de Mullonde), que traen frescura al elenco mientras Ramza, Delita y otros clásicos hacen apariciones significativas como mentores o antagonistas según las rutas elegidas. Este entramado de relaciones, y las luchas por el poder entre la iglesia y las casas nobles, sostienen el hilo conductor de una narrativa ramificada que se adapta a las decisiones tácticas y morales tomadas por el jugador.
Un aspecto recurrente en reseñas internacionales es la madurez y densidad del guion. Las conversaciones incluyen referencias filosóficas y cuestiones éticas sobre guerra, fe, identidad y redención. Los eventos se desarrollan a través de cinemáticas renovadas, viñetas estáticas al estilo Matsuno y secuencias in-game que, junto a docenas de misiones opcionales y escenas secundarias, profundizan en la historia de Ivalice.
Apartado técnico
El apartado gráfico de The Ivalice Chronicles es alabado por la prensa mundial. El diseño artístico combina dioramas isométricos tradicionales con modelos 3D estilizados y cuidadas animaciones, permitiendo rotar el mapa para examinar detalles ocultos y realizar tomas estratégicas en tiempo real. El trabajo de luz y sombra crea atmósferas que evolucionan con el ciclo del día y meteorología dinámica—neblinas, lluvias torrenciales y rayos de sol que afectan la visibilidad, el movimiento y ciertas habilidades especiales.
Ivalice se redescubre como un mundo vivo, con ciudades bulliciosas, ruinas devoradas por la maleza y regiones nevadas que cambian con el paso de las estaciones y los acontecimientos políticos. Los escenarios incluyen monumentos antiguos, secretos ocultos y misiones de exploración que recompensan a los jugadores atentos con loot único y revelaciones narrativas.
La banda sonora de Hitoshi Sakimoto y Noriko Matsueda combina remasterizaciones de temas clásicos con composiciones inéditas; la música evoluciona en función de la situación táctica y las alianzas, generando tensión y heroísmo en los momentos clave del combate y la trama. El doblaje se ofrece en inglés, japonés y francés, con performance destacadas, especialmente en escenas emocionales. Por cierto, ni rastro del español, ni voces ni textos, un punto menos para el juego.
A nivel técnico, el juego está bien optimizado. Sé que tiene algunos stutters en las versiones de Switch y Xbox cuando hay grandes ejércitos y efectos climáticos intensos, pero los parches posteriores han mitigado la mayoría de estos problemas y personalmente he jugado a la versión de PC y la de PS5 para esta review, así que no podría garantizar que eso sigue ocurriendo. Las opciones gráficas permiten personalización profunda en PC, incluyendo modos para daltónicos y accesibilidad para jugadores con discapacidad auditiva y visual.
Sistema de combate y jugabilidad
El sistema de combate representa la mayor evolución de todo el título. Se mantiene el grid táctico, pero ahora existe una mayor variedad de tipos de superficie (fangos, escalones, zonas mágicas, trampas ocultas) que pueden manipularse mediante skills especiales, hechizos o el entorno destructible. Los jugadores pueden reclutar hasta 30 unidades simultáneas y dividir el grupo en escuadrones independientes, permitiendo la ejecución de misiones paralelas y ataques sincronizados.
La IA aliada dispone de rutinas avanzadas: personajes controlados por la CPU proceden según afinidad, moral y experiencia previa, pudiendo, por ejemplo, rebelarse si las decisiones del jugador contradicen sus valores o abandonar el grupo temporalmente tras una derrota humillante. Los combates contra jefes presentan mecánicas únicas: algunos bosses cuentan con fases, invocaciones contextuales y habilidades de área con telegráficos visuales que obligan a adaptarse constantemente.
El sistema de trabajos ha sido expandido con más de 30 clases, permitiendo avances simultáneos en varias ramas y la creación de sinergias. Jobs avanzados como Sky Pirate, Vermillion Saint, Chronomancer y Blood Hunter incorporan habilidades exclusivas y pasivas que marcan diferencias radicales en estrategia. Las habilidades desbloqueadas pueden heredarse entre clases mediante el sistema de Legado, favoreciendo builds personalizadas.
Afinidad y moral no solo influyen en bonificaciones activas, sino que condicionan el desarrollo de personajes en el largo plazo: traiciones, romance, lealtad ciega y rivalidad entre miembros delimitan el acceso a misiones exclusivas y finales alternativos, otorgando profundidad emocional y táctica a cada decisión.
Destaca el modo Multijugador Online con batallas competitivas (versus y ligas por temporada), editor de mapas y clanes personalizados donde estrategias complejas y equipos únicos pueden enfrentarse por recompensas legendarias y rankings globales.
La gestión y progresión molan
Fuera de los combates, la gestión del clan ocurre mediante el sistema de Comandancia: cada decisión sobre diplomacia, comercio, desarrollo urbano y reparto de recursos impacta directamente en los ingresos, acceso a equipo, misiones de asedio o negociación con facciones neutrales (sky pirates, herejes, mercaderes). La expansión de tu base permite desbloquear habilidades pasivas, artefactos únicos y mercenarios especiales.
El juego se apoya en un sistema de Eventos de Mundo, donde acciones en una región pueden desencadenar invasiones o rebeliones en otra, afectando incluso rutas comerciales y el inventario de las tiendas locales. Existe un ciclo de estaciones y un calendario dinástico con festividades, recompensas especiales y misiones limitadas por semana in-game.
La progresión de personajes está ligada no solo al combate, sino también al desarrollo de relaciones y reputación: acciones como proteger pueblos o negociar treguas otorgan experiencia, itemización especial y triggers para finales ocultos. Ciertas decisiones pueden llevar, incluso, al exilio de Caelis y a una ruta secundaria con otros protagonistas tomando el mando.
Duración y contenido opcional
La campaña principal ronda las 55 horas solo examinando los capítulos esenciales, pero quienes exploran secundarias, dominan el contenido alternativo (árboles de jobs, misiones especiales, romances, clanes, y finales divergentes) pueden superar sin demasiado esfuerzo las 120 horas. El modo New Game+ permite importar unidades legendarias y probar rutas totalmente nuevas.
La densidad del contenido opcional es aceptable, existe una cantidad abrumadora de desafíos tipo «Trial of the Lion», arenas semanales, recopilación de artefactos malditos, bestiarios, personalización estética, y eventos temporales que se actualizan en tiempo real vía DLC gratuitos o expansiones de pago. A mi personalmente acabaron aburriéndome este tipo de desafíos, la verdad.
Veredicto Final
Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles es la obra de mayor madurez y escala en la franquicia TRPG de Square Enix, recogiendo la herencia del original y mezclándola con el refinamiento contemporáneo. Si tuviera que listar su lista de debilidades y fortalezas, sería la siguiente:
- Profundidad táctica excepcional, gracias a la diversidad de trabajos, habilidades, sistema de clanes y afectos.
- Narrativa rica, adulta y ramificada, con guion digno de la mejor tradición Matsuno.
- Arte y música de referencia, que realzan la inmersión y la épica de Ivalice.
- Un contenido secundario a la altura, con misiones, desafíos y modos opcionales que elevan considerablemente la rejugabilidad.
- Multijugador robusto y editor de mapas, que prometen una comunidad activa y duradera.
Los puntos que menos me gustaron:
- Curva de aprendizaje compleja: los jugadores novatos pueden sentirse abrumados por la cantidad de sistemas y su interacción.
- Primeros capítulos algo lentos en ritmo, priorizando la construcción política sobre la acción.
- Algunos desequilibrios en Jobs y matchmaking online todavía requieren parcheo.
- El calendario y los eventos de mundo pueden resultar restrictivos si no se gestiona bien el clan, penalizando el “farmeo” excesivo.
Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles no solo celebra el legado de la franquicia, sino que la expande y moderniza para convertirla en piedra angular dentro del género SRPG.