Si ya tienes en tu poder una nueva ROG Xbox Ally la llevas a todas partes, pero siempre acabas buscando un enchufe, Microsoft tiene una noticia que te va a gustar. En las próximas semanas, la consola portátil recibirá una actualización con Perfiles de Juego Predeterminados, una función que ajusta automáticamente el equilibrio entre FPS y consumo de energía según el juego que estés jugando. Traducción: más fluidez cuando la acción se pone intensa y más batería cuando el juego lo permite, sin que tengas que andar tocando configuraciones como un loco. Por fin podrás jugar a Starfield o Forza Horizon 5 sin que la batería se funda en media hora o sin sufrir lag en los momentos clave.
Pero esto no es más que el aperitivo. A principios de 2026, Microsoft planea soltar un combo de mejoras que prometen cambiar la experiencia en las Ally. Entre ellas, destaca la Superresolución Automática (Auto SR), una función impulsada por IA que ajustará la resolución dinámicamente para mantener los FPS altos sin sacrificar demasiado la calidad visual. O sea, que podrás disfrutar de gráficos decentes sin que el juego vaya a trompicones. Y como guinda, la Xbox Ally X tendrá una función de «Mejores Momentos», que (según algunos rumores) capturará automáticamente tus jugadas más épicas para que luego puedas presumir en redes o guardarlas como recuerdo.
In the coming weeks, Xbox Ally players can look forward to previewing Default Game Profiles, a new feature that balances frame rate and energy use for select titles to give players smooth, enjoyable gameplay while extending battery life. And that’s just the beginning. Early…
— ASUS ROG Ally Life (@ROGAllyLife) October 16, 2025
Conectividad y más: ¿Adiós a los cortes?
Otro de los puntos negros de las consolas portátiles es la conexión a internet, especialmente si juegas en línea o en streaming. Pues bien, Microsoft también ha prometido mejoras en la experiencia de conexión para ambas Ally a principios del próximo año. Esto incluye (o eso esperamos) menor latencia, conexiones más estables y menos cortes cuando estés jugando en la nube o descargando actualizaciones en un Starbucks. Porque, seamos honestos, nada fastidia más que un timeout en medio de una partida de Fortnite o que Diablo IV se trabe porque el Wi-Fi del bar esté saturado.
Y no, no es magia: es optimización de software y, muy probablemente, ajustes en el hardware para sacarle más partido a los componentes. Si a esto le sumamos la Auto SR y los perfiles de juego, parece que Microsoft quiere que la Ally deje de ser «la consola portátil que va bien… cuando está enchufada» para convertirse en una bestia equilibrada, capaz de ofrecer rendimiento y autonomía sin que tengas que elegir. Eso sí, habrá que ver cómo funcionan estas mejoras en la práctica, porque las promesas en el papel suelen sonar mejor que en la realidad. Pero si Microsoft cumple, 2026 podría ser el año en que las consolas portátiles den el salto definitivo.