James C. Williams, conocido en línea como «Archbox», enfrenta una demanda por parte de Nintendo of America. La compañía solicita una indemnización de 4,5 millones de dólares por su presunta participación en una red de piratería de Nintendo Switch. Según los documentos judiciales, Williams gestionó varias tiendas online no autorizadas que distribuyeron decenas de miles de títulos pirateados entre 2019 y 2024.
La demanda detalla una compleja red de operaciones de piratería supuestamente creada y mantenida por Williams. Entre las plataformas involucradas se encuentran JITS (Jack-in-the-Shop), con más de 58,000 miembros de Discord; Turtle in the Shop, un servicio de respaldo con más de 61,000 usuarios; y LiberaShop, que ofrecía acceso a más de 33,000 copias digitales de juegos de Nintendo. Williams también es acusado de ser moderador sénior de la comunidad de Reddit «SwitchPirates», que alcanzó casi 190,000 miembros.
Detalles de la operación de piratería
El equipo legal de Nintendo explicó que la compañía utiliza avanzadas medidas de protección tecnológica en el hardware y software de la Switch para evitar la copia y el uso no autorizados. Sin embargo, Williams presuntamente distribuyó herramientas de elusión como la aplicación «Tinfoil» y el software «Signature Patches», que permitían a los usuarios eludir estas restricciones. Estas herramientas fueron promocionadas y distribuidas personalmente por Williams a través de plataformas como GitHub.
Un elemento clave de la denuncia es un supuesto plan de donaciones. Los usuarios eran animados a enviar tarjetas de regalo de la Nintendo eShop a Williams. Estos fondos se utilizaban para comprar juegos digitales legítimos, que luego se reproducían y distribuían gratuitamente a través de la red pirata. Los donantes recibían acceso a niveles exclusivos «pro» de las tiendas piratas, otorgándoles acceso prioritario a títulos inéditos o de alta demanda.
Acciones legales y consecuencias
Nintendo envió una carta de cese y desistimiento a Williams el 26 de marzo de 2024, advirtiéndole que cesara inmediatamente sus actividades. Aunque Williams inicialmente reconoció haber actuado mal, no confirmó su cumplimiento por escrito y posteriormente intentó borrar las pruebas eliminando su cuenta de GitHub y sus publicaciones en redes sociales. La demanda se notificó oficialmente el 13 de agosto de 2024 y, ante la falta de respuesta de Williams, un secretario judicial lo declaró en rebeldía el 8 de noviembre de 2024. Williams contrató brevemente a un abogado para una citación relacionada, pero no se ha defendido formalmente de las demandas de Nintendo.
La compañía reclama una indemnización por daños y perjuicios de 150.000 dólares por cada uno de los 30 títulos representativos, lo que resulta en una reclamación total de 4,5 millones de dólares. Nintendo describió esta cifra como conservadora, señalando que la infracción probablemente se extendió a un número mucho mayor de juegos. La firma decidió no solicitar sanciones adicionales por infracciones de la Ley de Derechos de Autor de la Era Digital (DMCA) ni la recuperación de costas legales, lo que sugiere que su objetivo principal es establecer la rendición de cuentas y disuadir la piratería futura.